El día de hoy queremos que nos acompañes a viajar a las ciudades que están mejorando la calidad de vida de sus habitantes, fomentan la sustentabilidad y aprovechan los recursos naturales de manera responsable. Conoce las 10 ciudades más verdes del planeta mundo.
- Copenhague
La capital de Dinamarca es considerada una de las ciudades más sustentables del mundo. Cuenta con una avanzada infraestructura para ciclistas, por lo que la mitad de su población se desplaza en bicicletas. La ciudad también ha reducido sus emisiones de carbono en un 42% cambiando el modo de producir electricidad por energías limpias. Además, cuenta con más de 2.200 hectáreas verdes de acceso público.
- Ámsterdam
Ubicada en los Países Bajos, esta urbe (al igual que la anterior) es conocida por sus bicicletas. Pero lo impresionante es que estas superan en número a los habitantes de Ámsterdam, lo que la convierte en la ciudad con más bicis en el mundo. Así, logran disminuir el uso de combustible y tener una mejor calidad del aire. Pero también tienen el objetivo de transformarse en la primera ciudad libre de emisiones de carbono para el 2025.
- Estocolmo
La capital de Suecia tiene el sistema de transporte público más eficiente del planeta y el menos contaminante. Pero eso no es suficiente, pues el gobierno planea que para 2050 Estocolmo se convierta en una ciudad libre de combustibles fósiles.
- Berlín
Esta ciudad está llena de espacios verdes como parques y jardines, más que cualquier otra ciudad en Europa. Su forma de reciclaje se considera vanguardista porque pagan a las personas que reciclan botellas de plástico e incentivan la economía circular.
- Portland
Esta urbe cuenta con una gran cantidad de áreas verdes, más que cualquier otra en Estados Unidos .Y gracias al gobierno local han logrado reducir su uso de combustibles fósiles en un 46%.
- San Francisco
La ciudad famosa por el Golden Gate se encuentra rodeada de mar, bosques y parques que la hacen ser un gran ejemplo de cómo conseguir ser una metrópoli verde. Comenzó mejorando su método de reciclaje y el uso de energía. También logró reducir considerablemente las emisiones de carbono que producía su transporte público.
- Vancouver
Se trata de la ciudad con más densidad y diversidad de Canadá. Aquí nació el movimiento ecológico Greenpeace, lo que nos dice mucho sobre su compromiso con el cuidado del medio ambiente. Aspira a convertirse en la ciudad más verde del mundo gracias al uso de energías limpias y la ampliación de zonas verdes. Además, es la ciudad que menos cantidades de gases contaminantes emite en todo el continente americano.
- Helsinki
La capital de Finlandia tampoco se queda atrás en el uso de la bicicleta y el transporte público como principales medios para desplazarse por la ciudad. La protección ambiental también es muy importante para los habitantes, por lo que sus animales, los bosques y otras reservas naturales se encuentran estrictamente protegidas. Por otro lado, la baja densidad poblacional permite que sus ciudades sean más pequeñas y tengan más espacios verdes.
- Reikiavik
Es la capital costera de Islandia y la ciudad más grande del país. Gracias al uso de autobuses que funcionan con hidrógeno, fuentes térmicas y eléctricas renovables, se han propuesto dejar de utilizar cualquier combustible fósil para el año 2026. Y esto les resultará fácil pues solo el 0.1% de su energía se genera con estos combustibles.
- La Habana
Por último, tenemos a una ciudad ubicada en Latinoamérica. En la capital de Cuba se practica el cultivo en huertos urbanos para la producción de alimentos. Esto la ha llevado a convertirse en un país pionero en la transición hacia una agricultura sostenible que ayuda al medio ambiente.
¿Qué te parecieron las estrategias de estas ciudades para conseguir ser más verdes? ¿Te gustaría vivir en una de ellas?
Las ciudades más verdes del mundo que te presentamos empezaron con pequeñas acciones, así que nosotros también podemos comenzar a cambiar nuestras localidades para que en un futuro aparezcan en esta lista. Te compartimos algunos consejos para cuidar el medio ambiente.
Fuente: Ethic / New York Times / FAO